Ejer.. que¿?

viernes, 30 de marzo de 2012
Hace aproximadamente 6 meses que comencé a hacerme a la idea que necesitaba hacer ejercicio con urgencia, en primera por salud, en segunda por estética y la ultima por vanidad y/o amor a mio misma, así que un día desempolve mis viejos tenis y ya con mi pants me fui a correr (o al menos eso pretendía) al parque que está cerca de mi casa, la sorpresa fue cuando llegue ahí y siendo las 8 de la noche había todavía mucha gente, entre ellos niños jugando y personas corriendo o en sus bicicletas me mentalice hacer ejercicio, así que me puse mis audífonos y comencé a caminar luego a trotar poco a poco y por ultimo regresar a caminar, pero después de un rato me di cuenta que había mas gente en el parque de lo que creía e incluso varias personas más que ya estaban trotando en el parque no me permitían trotar con toda la flojera del mundo que tenia en esos primeros días, así que después de concluir una hora dando vueltas y vueltas me regresé a casita triste, cansada y con un pulmon de fuera.

Al otro día yo no quería ir al parque por que me desesperaba la idea de que hubiera tanta gente corriendo o haciendo otras actividades lo que entorpecía en muchas ocasiones mi trotar, así que fui a uno de los gimnasios cercanos a mi casa y me di cuenta que el estar encerrado haciendo ejercicio es igual (o peor) que estar corriendo en el parque por que ahí hay más gente, más ruido y todo eso en un reducido espacio, aún así necesitaba algo que me hiciera decirme todos los días tienes que hacer ejercicio si novas a perder algo... y pues que mejor actividad que pagar un gimnasio en el que si no vas tu dinero literalmente se va a la basura, así que pague la mensualidad de pesas que incluia cardio, (bicicleta, caminadora y escaladora) y  pesas, eran como 300 al mes aproximadamente y quedé con el instructor de ir al día siguiente.

Con el tiempo comencé a darme cuenta que para poder ocupar los equipos estando semi-vacíos y poder terminar toda la rutina de ejercicios (misma que pedí el primer día antes de pagar la mensualidad y tomándola en cuenta como requerimiento para inscribirme (=P) tenia que irme a una hora en la que el gym en vez de llenarse comenzaba a vaciarse y esto era entre las 7 y las 9 de la noche, así que después de las 2 semanas yo comenzaba a estar feliz con el ejercicio y los resultados comenzaron a hacerse notar, al segundo mes por cuestiones varias renuncié al trabajo que tenía y me quede sin dinero por lo que tuve que regresar a correr al parque en contra de mi voluntad.

Después de tanto ir y venir encontré un gimnasio cerca de donde trabajo cuya mensualidad es de 300 pesos y tenia la opción de entrar a clases de zumba, cardio, pilates, kick boxing, pesas y adicional a esto hacer uso de la caminadora, elíptica, escaladora y bicicletas, así que acomodé mis horarios y comencé a ir al gym después del trabajo.

Las primeras semanas fueron de gloria y sufrimiento, gloria por que después del estrés del trabajo el ir al gym me ayudaba a depurar mi mente de todas las cosas que me pasaban en la oficina permitiéndome llegar a dormir como un bebe y sufrimiento por que no había día en la que una parte de mi ser se quejara del esfuerzo que estaba haciendo.

Ahorita tengo ya 2 meses y medio yendo al gimnasio y con ellos 156.3 km recorridos, 10 351 calorías quemadas y el haber corrido durante 26:14:08 hrs. y cada uno de esos numeritos representan para mi un gran logro pues jamas imagine que el ejercicio me diera los motivos suficientes como para no dejarlo de practicar.

Pero por que cuento todo esto?...

La respuesta es simple, yo no corría ni por que tuviera un T-Rex detrás de mi apunto de comerme y menos me levantaba del sillón cuando estaba en modo flojera y ahora el estar activa me ha dado una nueva perspectiva de todo lo que me pasa, con el ejercicio he logrado darme cuenta que todos somos guapo@s pero nosotros mismos nos descuidamos hasta el hartazgo y lo peor es que siempre nos quejamos de que tenemos mala salud, que la ropa no nos queda, que estamos pasados de peso y queremos mejorar pero no hacemos nada por hacer posible ese cambio y así seguiremos hasta que queramos realmente hacer algo para cambiar nuestra salud, nuestra ropa, nuestra imagen y hasta el amor a uno mismo.

Así que si algún día alguien te invita a hacer ejercicio o tu mismo en alguna ocasion sientes ganitas de hacer algo que te haga bien a tu salud pero si sigues poniendo la misma cara de what cada que alguien menciona esa palabra te invito a quitarte por un mes la flojera y ponerte tu traje de yo puedo yo quiero y lo voy a hacer y verás que todo puede ser diferente.

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